A pesar de que el chocolate pueda parecer tremendamente inofensivo para los animales, hay que destacar que resulta un alimento potencialmente dañino si es consumido por perros o gatos. Debes tener bien claro que el chocolate es tóxico, tanto para perros como para gatos.
Aunque rara vez es mortal, la ingestión de chocolate puede provocar una enfermedad grave tanto en perros como en gatos. Como veremos con más detalles un poco más abajo, el chocolate es tóxico porque contiene una sustancia química llamada teobromina, además de cafeína.
La teobromina es la toxina predominante en el chocolate y es muy similar a la cafeína. Ambos productos químicos también se utilizan con fines medicinales como diurético, estimulante del corazón, dilatador de los vasos sanguíneos y relajante del músculo liso. Los perros no pueden metabolizar la teobromina y la cafeína tan bien como las personas. Esto los hace más sensibles a los efectos de las sustancias químicas.
Motivo de la toxicidad
El chocolate posee una sustancia que se conoce como teobromina, un producto que deriva de los árboles de cacao. La teobromina es un componente tóxico para los animales domésticos, ya que puede afectar negativamente sobre diversos órganos del animal como los riñones, el corazón e incluso el sistema nervioso, además de no mencionar los pequeños contenidos en cafeína. Aquellos chocolates que posean un mayor contenido de esta sustancia procedente de los árboles de cacao, pueden provocar unos efectos mucho más perjudiciales.
De hecho, se calcula que cada año son cientos los perros y gatos los que terminan intoxicados en Estados Unidos como consecuencia del consumo de chocolate. Muchos dueños de estos animales que caen enfermos no se dan cuenta de que su mascota se encontraba mal después de su ingesta.
Es importante conocer cuáles son los síntomas que provocan la intoxicación o envenenamiento por chocolate. Entre los síntomas destacables que hay que tener en cuenta citar: diarrea, vómitos, temblores, espasmos musculares, arritmias, inquietud, exceso de micción (en perros) e incluso, en los casos más graves, provoca el coma.
Peligrosidad del chocolate
La peligrosidad del chocolate dependerá de la cantidad y calidad del chocolate que ingiera el animal. Aunque una muy pequeña ingesta de chocolate no debería provocar ningún daño al animal, hay que señalar que ello dependerá principalmente del tipo de chocolate que se ingiera, así como del peso que tenga el animal. El chocolate de cocción que no está endulzado posee seis veces más teobromina que el chocolate con leche.
La cantidad de teobromina tóxica varía según el tipo de chocolate. Cuanto más oscuro y amargo es el chocolate, más peligroso es para los perros y para los gatos. El chocolate para hornear y el chocolate negro están altamente concentrados y contienen 130-450 mg de teobromina por onza, mientras que el chocolate con leche común solo contiene alrededor de 44-58 mg por onza.
Por otra parte, el chocolate blanco apenas representa una amenaza de intoxicación por chocolate con solo 0,25 mg de teobromina por onza de chocolate (dicho esto, los perros aún pueden enfermarse por toda esa grasa y azúcar, que pueden causar pancreatitis).
Para poner esto en perspectiva, un perro de tamaño mediano que pesa 50 libras solo necesitaría comer 1 onza de chocolate de panadería, o 9 onzas de chocolate con leche, para mostrar potencialmente signos de envenenamiento. Para muchos perros, la ingestión de pequeñas cantidades de chocolate con leche no es perjudicial.
Las dosis tóxicas de teobromina son de solo 20 mg / kg. Con esta cantidad se puede ver agitación, hiperactividad y signos gastrointestinales (como babeo, vómitos y diarrea, que pueden oler a chocolate).
En dosis superiores a 40 mg / kg, se pueden observar signos cardíacos que incluyen frecuencia cardíaca acelerada, presión arterial alta o incluso arritmias cardíacas. En dosis de más de 60 mg / kg, se pueden observar signos neurológicos, que incluyen temblores, espasmos e incluso convulsiones. Se han observado muertes alrededor de 200 mg / kg o cuando ocurren complicaciones.
Tratamiento ante la intoxicación por chocolate
El tratamiento depende de la cantidad y el tipo de chocolate ingerido. Si se trata temprano, la eliminación del chocolate del estómago mediante la administración de medicamentos para inducir el vómito y la administración de carbón activado para bloquear la absorción de teobromina en el cuerpo puede ser todo lo que sea necesario.
Por norma general, si la ingesta de chocolate es muy baja, los perros y gatos suelen ser capaces de filtrar esta sustancia por sí mismos y evitar ningún tipo de tratamiento veterinario, pero lamentablemente no siempre es así.
En el caso de que tu perro o gato haya ingerido chocolate y presente los anteriores síntomas, será clave acudir de inmediato al veterinario, quien deberá inducirle al vómito. Además, también se administrará carbón activado, ya que es un buen adsorbente de las sustancias tóxicas que se encuentran dentro del sistema digestivo del animal.
Es muy común proporcionar tratamientos de apoyo, como la fluidoterapia intravenosa, para ayudar a estabilizar al animal y promover la excreción de teobromina. Todos los perros y los gatos que ingieren chocolate deben ser monitoreados de cerca para detectar cualquier signo de agitación, vómitos, diarrea, nerviosismo, ritmo cardíaco irregular y presión arterial alta. A menudo, pueden ser necesarios medicamentos para disminuir la frecuencia cardíaca para tratar la frecuencia cardíaca elevada y la arritmia.
Es muy importante dejar el chocolate y cualquier producto que lo contenga fuera del alcance de gatos y perros. Además, es muy importante informar a todos los miembros de la familia de que las mascotas no deben comer chocolate. Esto debe ser inculcado especialmente en los niños, que probablemente quieran compartir el chocolate con sus amigos peludos.