Mucha gente practica el método Pilates, y lo hace por razones bien distintas. Y, al contrario de lo que ocurre con otras disciplinas deportivas, sus cuerpos, en apariencia, pueden tener muy poco en común. Aquí radica la principal característica de un cuerpo pilates: lo importante es lo que no se ve.
Si bien es cierto que existen ciertos ideales asociados con la idea de un cuerpo formado por el método Pilates, y hay resultados tangibles que acercan el cuerpo a esos ideales, lo cierto es que no existen reglas sobre cómo debe ser.
Características de un cuerpo pilates
Cuando Joseph Pilates desarrolló su método no habló sobre los músculos largos, delgados o abdominales planos como vemos en la publicidad corporal del método Pilates. Joseph Pilates estaba interesado en el cuerpo como un paquete total de salud y vitalidad, de lo que resulta una agradable presentación externa, lo que supone abdominales planos, mejor postura y musculatura equilibrada.
Un cuerpo pilates comienza en el interior
Un verdadero cuerpo de pilates comienza en el interior, en los sistemas de respiración y circulación del cuerpo. Joseph Pilates dijo que, por encima de todo, uno debería aprender a respirar adecuadamente. La respiración completa alimenta y estimula el sistema circulatorio, que es un proceso de limpieza del cuerpo que desintoxica la sangre y refresca las células.
Aquí está la raíz de la vitalidad que necesitamos para disfrutar de la vida y el ejercicio. Cuando la respiración y la circulación funcionan bien, el cuerpo también tiene un ritmo natural en el que los órganos se tonifican y se refrescan, y hay energía para la vida diaria.
Además, en un cuerpo de pilates, una columna vertebral fuerte y flexible es de suma importancia. Los ejercicios de pilates están diseñados para garantizar que la columna vertebral esté bien soportada por los músculos centrales y que haya una alineación adecuada de todos los huesos. Como dijo Joseph Pilates, la única guía real para su verdadera edad «es el grado de flexibilidad natural y normal disfrutado por su espina dorsal durante toda la vida».
Control físico y mental
La especificidad en Pilates es un arma de doble filo, ya que tiene un aspecto mental y otro físico. Es precisamente la concentración mental lo que hace que cada entrenamiento acerque a los practicantes cada vez más hacia su meta.
Pilates no tiene nada que ver con otras formas de trabajo físico en las que se realizan movimientos sin sentido.
En lo físico, el método Pilates se define por las instrucciones precisas que se adaptan a cada persona y a cada movimiento concreto. El ritmo, la colocación del cuerpo, las indicaciones musculares, etc. son específicas para cada ejercicio y para cada persona.
Movimiento grácil y eficiente
Un cuerpo de pilates se mueve con gracia y eficiencia. La manera de moverse, no solo en el gimnasio o en el estudio pilates, sino en la vida diaria, es el aspecto más importante del entrenamiento de este método. Para Joseph Pilates, el objetivo era proporcionar un método de entrenamiento que le permitiera al cuerpo hacer lo que se le pide con gracia, facilidad y eficiencia.
Desarrollo uniforme
Un cuerpo ideal de pilates se caracteriza por un desarrollo muscular uniforme y funcional. De hecho, la fuerza sin volumen es uno de los aspectos de pilates más llamativos. El desarrollo muscular uniforme no solo es un visual agradable, también es un resultado natural de entrenar el cuerpo para moverse a un alto nivel de armonía y eficiencia.
Los codiciados músculos abdominales planos que el método promueve son simplemente el resultado natural de un sistema de ejercicio que enfatiza la fuerza y la flexibilidad del núcleo a través de la coordinación armoniosa de los músculos y la alineación esquelética al servicio de una actividad elegante y eficiente. Los abdominales se fortalecen, pero también están entrenados para trabajar juntos adecuadamente.