La tenosinovitis de De Quervain es una de las tendinitis más frecuentes y afecta a los dos tendones que atraviesan una de las seis correderas extensoras de la muñeca, provocando inflamación y dolor tanto de los tendones como de la vaina que los recubre.
En este artículo te contamos su sintomatología, las posibles causas y cómo puede contribuir a su alivio la práctica del quiromasaje.
Qué es la tenosinovitis de De Quervain
La tenosinovitis de De Quervain es una inflamación de los tendones, y en ocasiones de la vaina que los recubre, del primer compartimento extensor de la muñeca – abductor largo y extensor corto del pulgar – que son los encargados de separar y extender el dedo pulgar hacia fuera.
Esta afección fue descrita por primera vez por un cirujano suizo, el barón Fritz De Quervain, en 1895. Otros nombres de esta patología son tendinitis de De Quervain, esguince de la lavandera o esguince del pulgar del esquiador.
Anatomía y fisiopatología
La tenosinovitis de De Quervain afecta al primero de los seis compartimentos tendinosos del dorso de la mano a través del que se deslizan ambos tendones. El primer compartimento extensor se localiza en el lado radial de la muñeca y los dos tendones forman el borde lateral de la fosa radial también denominada tabaquera anatómica.
La tabaquera anatómica es una depresión en forma de triángulo cuyos borde radial, como hemos mencionado, está delimitado por los tendones del extensor corto del pulgar y del abductor largo del pulgar, el borde cubital o medial por el tendón del extensor largo del pulgar y el borde proximal con la apófisis estiloides del radio. Y todo ello descansa sobre los huesos carpianos escafoides y trapecio.
Por alguna de las posibles causas que veremos en el siguiente apartado, se produce un edema y un aumento de la vascularización de la vaina sinovial de cada uno de los tendones. La vaina se engrosa y el líquido se vuelve más espeso, dificultando el deslizamiento del tendón.
Si continúa el sobreuso del tendón, suelen aparecer adherencias entre el tendón y la vaina y también, debido al estrechamiento del paso por el primer compartimento, adherencias entre los dos tendones.
Causas de la tenosinovitis de De Quervain
Lo cierto es que a pesar de las investigaciones, aún no se ha establecido una causa clara que dé lugar a la tenosinovitis de De Quervain. Algunos de los factores asociados a su aparición son los siguientes:
- Cargas y movimientos mantenidos y repetitivos que implican la abducción y extensión del pulgar y la desviación radial de la muñeca. Un sobreuso del ordenador, la práctica de deportes como el golf o el tenis o tocar el piano, son algunas de las actividades que pueden causar la tenosinovitis de De Quervain.
- Tras un traumatismo que afecte a la zona anatómica que hemos mencionado.
- Alteraciones anatómicas congénitas.
- Otra causa relacionada es la alteración hormonal, por razones varias como el embarazo, la lactancia, el uso de determinados anticonceptivos o la menopausia, y la retención de líquidos que se produce.
- Estar afectado por enfermedades reumáticas e inflamatorias como la gota o la artritis reumatoide en las que se produce la inflamación de la membrana sinovial.
- También las personas aquejadas de diabetes tienen mayor riesgo de sufrir tendinitis. Los niveles elevados de glucosa de forma mantenida dañan los componentes del tejido conectivo.
- Igualmente, la laxitud de los ligamentos y, por consiguiente, la mayor inestabilidad de la muñeca constituye un factor que predispone a padecer esta afección.
Síntomas de la tenosinovitis de De Quervain
La sintomatología de la tenosinovitis de De Quervain es la inflamación y el dolor que afectan la funcionalidad y movilidad de la mano.
Se presenta mayormente en mujeres de veinte a cincuenta y cinco años, con especial incidencia en el tramo de cuarenta a cincuenta años. Es una patología relacionada con la realización de cargas y acciones repetidas muchas veces como escurrir un trapo o sostener a un bebé con las manos.
El dolor se concreta debajo del pulgar, en la zona de la apófisis estiloides radial y puede irradiar hasta el dedo o por el antebrazo según el movimiento.
Este dolor se acrecienta al sostener o agarrar fuerte, cerrar el puño o al intentar girar la mano provocando una desviación cubital de la muñeca. En los casos más intensos también existe hinchazón en la zona afectada por el engrosamiento de las vainas de los tendones debido a la inflamación y es audible una crepitación.
El dolor intenso puede darse durante la noche impidiendo dormir.
Diagnóstico de la patología
Al realizar la anamnesis, la actividad profesional o de ocio y la sintomatología dan las primeras indicaciones de la posible patología. El diagnóstico suele confirmarse con pruebas de imagen como la radiografía y la resonancia magnética.
La radiografía permite observar si existen calcificaciones en las vainas y alguna afección ósea o articular.
La ecografía es la prueba que posibilita el estudio de la forma, el grosor y la trayectoria de los tendones y sus vainas para poder confirmar la presencia de la tenosinovitis de De Quervain.
La maniobra de Finkelstein es otro de los recursos que se utilizan para ello. Consiste en agarrar el pulgar del posible afectado por la patología y abducir su mano en dirección cubital. El resultado se considera positivo si se produce un dolor agudo. Es importante no confundir esta maniobra con la de Eichhoff para no dar lugar a falsos positivos.
Otro motivo de sospecha es el sentir dolor durante la extensión resistida del pulgar al efectuar la maniobra de autoestopista.
Quiromasaje para aliviar esta patología
En la fase de inicio, para disminuir la inflamación y el dolor más intenso es conveniente aplicar frío en la zona e inmovilizar la articulación con el uso de una férula o muñequera que mantenga el pulgar en posición de reposo.
Pasado el episodio más crítico de dolor, es necesario reducir o evitar, si es posible, los movimientos repetitivos que causan la inflamación y el dolor.
El quiromasajista realiza la anamnesis y las siguientes pruebas funcionales:
- Maniobra de Finkelstein
- Palpación del escafoides para descartar su fractura
- Movimiento pasivo del pulgar comprobando que no duela
- Abducción y extensión resistida del pulgar con evidencia de dolor
El protocolo de recuperación que aplica el quiromasajista consiste en:
- Masaje relajante de la mano y el antebrazo
- Maniobras de apertura articular de la mano
- Movilizaciones pasivas en la muñeca y el pulgar
- Estiramientos pasivos de la muñeca y el pulgar
- Estiramientos de la cadena flexora del antebrazo
- Decoaptaciones de la muñeca
- Cyriax suave en el ligamento anular del carpo y en los tendones afectados
- Masaje de descarga del miembro superior
En función del nivel de dolor actuaremos más superficialmente, aumentando de manera progresiva la profundidad del protocolo.
Buenas tardes, me encanta conocer como ayudar al cuerpo humano para mejorar a quien necesite..