Tratamientos recomendados para personas con fibromialgia

La fibromialgia indica dolor en músculos y tejido fibroso. Es una enfermedad que produce cansancio generalizado, con dolores persistentes en ciertos puntos e impide descansar durante las horas de sueño.

Aunque su procedencia no está clara, el mundo científico está de acuerdo en que su origen es neurológico. Actualmente no hay cura para la fibromialgia, así que todos los tratamientos están centrados en mejorar la calidad de vida de quienes la padecen controlando los síntomas.

Además de fármacos, existen terapias que pueden ayudar a aliviar los dolores de la fibromialgia y en este punto dónde entra en juego el buen hacer de los profesionales. Hay también técnicas como el pilates que ayudan a mejorar la vida de las personas con dolores crónicos e incluso deportes como el Ciclo Indoor.

El objetivo principal es el alivio del dolor y otros síntomas asociados con la fibromialgia y ayudar al individuo afectado a enfrentar la afección. El tratamiento puede incluir fisioterapia, métodos para aliviar el estrés, incluidos masajes ligeros y drenaje linfático manual, y medicamentos para el dolor y el control del sueño. Además, el drenaje linfático también puede ayudar.

Terapias para la fibromialgia

Reflexología para la fibromialgia

La reflexología es una terapia manual que puede ayudar a mejorar las sensaciones de quienes padecen la enfermedad. Estas mejoras varían en función del estado de cada persona pero, entre otros, puede aliviar la fatiga y el agotamiento trabajando las zonas reflejas de la glándula suprarrenal; mejorar el trastorno del sueño trabajando lo puntos reflejos del estrés; mejorar la rigidez muscular matutina y aliviar las migrañas mediante el trabajo en el cuello y la cabeza.

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Masajes para la fibromialgia

La lógica nos dice que el masaje puede ser beneficioso para la fibromialgia, debido a que esta enfermedad implica dolor, rigidez y ansiedad. Sin embargo, no siempre el resultado de un masaje a una persona que padece fibromialgia es tan positivo y evidente como parece. Para algunas personas con fibromialgia, el masaje puede tener un efecto muy positivo, mientras que a otras el masaje le puede resultar incluso perjudicial.

El quiromasaje ayuda a mejorar la circulación sanguínea en las zonas que se están trabajando y también mejora la flexibilidad del cuerpo. Además, disminuye la rigidez articular y por tanto el dolor.

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El masaje con piedras calientes también puede ser de ayuda para aliviar el dolor asociado a la fibromialgia, así como la Terapia Craneosacral y el Drenaje linfático.

Drenaje linfático

Un estudio de 2009 publicado en el Journal of Manipulative and Psychological Therapeutics descubrió que los pacientes de fibromialgia tenían una mejora en los síntomas a través de la terapia manual de drenaje linfático y el masaje del tejido conectivo.

El sistema linfático es una red compleja de vasos linfáticos y órganos que circula el líquido linfático y las células especializadas en todo el cuerpo con el fin de destruir los patógenos y filtrar los desechos para que puedan ser eliminados del cuerpo. Cuando el sistema linfático funciona bien nos sentimos saludables y tenemos una fuerte defensa contra las enfermedades. Pero cuando va lento o está  bloqueado, ya sea después de una cirugía o una lesión, podemos tener hinchazón, sentirnos cansados ​​y volvernos más susceptibles a enfermedades e infecciones.

Aunque los vasos linfáticos se encuentran en todo el cuerpo, la mayoría de ellos (alrededor del 70% de ellos) se encuentran justo debajo de la piel. Con las técnicas de drenaje linfático, los vasos linfáticos se masajean suavemente para movilizar el líquido linfático. El drenaje linfático ayuda a regular el sistema inmune, eliminar bloqueos, eliminar desechos metabólicos y toxinas del cuerpo, así como reducir el exceso de líquido. Por lo tanto, debido a que la técnica es tan suave, es bien tolerada por los pacientes con fibromialgia, que a menudo experimentan muchos puntos gatillo en todo el cuerpo.

Las alteraciones bioquímicas son un factor clave en la fibromialgia, por lo que restaurar la función mecánica del sistema linfático puede ser importante. Algunos especialistas explican que el estancamiento linfático podría explicar el dolor generalizado en todo el cuerpo que sufren las personas con fibromialgia.

Como el sistema linfático no puede recoger los desechos en el cuerpo y esos desechos se acumulan en los nervios, en los tejidos, en los músculos darían lugar el dolor de la fibromialgia. Además, cuando el cuerpo es más ácido y el sistema linfático no fluye, el cuerpo tiende a ser ligeramente ácido, lo que provoca que la  sangre no pueda retener el oxígeno tan eficientemente y se necesite oxígeno para producir energía.

Con el drenaje linfático se facilitan estos procesos, eliminando desechos y ayudando que a alcalinizar el organismo.

Shiatsu para la fibromialgia

Según un estudio del año 2013, las personas tratadas con shiatsu tuvieron mejoras significativas en todas las medidas excepto en la ansiedad.

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Respecto a las experiencias de cada persona con las terapias de masaje, es importante recordar que cada caso de fibromialgia es único y que cada uno tiene que elegir los tipos de tratamientos que mejor sirvan a sus necesidades e intereses. Además, no todos los profesionales del masaje son iguales ni tienen las mismas habilidades y conocimientos, no solo de las técnicas, sino también de las necesidades de cada condición de salud.

En el caso concreto de la fibromialgia, algunos de ellos la entienden mejor que otros, especialmente en lo que se refiere a la sensibilidad al tacto que una persona con este problema de salud puede tener. Por lo tanto, antes de recurrir al masaje para tratar algunos de los síntomas de la fibromialgia es necesario conocer bien en qué consiste la técnica y proporcionar al terapeuta suficiente información sobre la condición de salud particular y sus síntomas concretos.