El imprinting es uno de lo fundamentos del método Pilates. De hecho, es uno de los ejercicios más básicos del método, aunque también puede ser uno de los más profundos. De lo que no cabe duda es de que el imprinting es un ejercicio fundamental para todos los que practiquen el método Pilates. Es más, hacerlo bien es un paso imprescindible para hacer correctamente muchos de los ejercicios que se ejecutan con el método.
Es una de las primeras posiciones que se aprenden al comenzar el entrenamiento de Pilates. El objetivo fundamental del imprinting es ayudar a centrar la mente y el cuerpo y a facilitar la liberación de los músculos intrínsecos de las vértebras, así como permitir que la columna deje «huella» o «se funda» con el suelo.
Beneficios y utilidad del imprinting
El imprinting ayuda a alargar y relajar la columna vertebral y a acomodarse en el propio cuerpo. Sirve para estabilizarlo durante los ejercicios en los que se levantan ambas piernas del suelo.
Esto es particularmente útil en ejercicios donde ambas piernas están extendidas y están a un ángulo bajo del piso. Al mantener la espalda presionada contra el mat y los abdominales hacia abajo para lograr esto, el cuerpo queda bien anclado.
Además, el imprinting es un ejercicio simple que se puede usar en cualquier momento para reducir el estrés y refrescar la mente, así como enfocar la mente y concentrarse.
Cómo hacer correctamente el imprinting
- Tumbarse boca arriba con los brazos a los lados a lo largo del cuerpo, las rodillas flexionadas y los pies apoyados en el suelo. Esto dará lugar de forma natural a una posición neutral de la columna vertebral, permitiendo que la columna descanse con sus curvas naturales.
- Relajar los hombros, dejando que caigan hacia el suelo.
- Respirando profundamente, relajar la mandíbula y la garganta.
- Relajar la caja torácica, dejando caer el esternón y que la parte posterior de las costilla se muevan hacia el suelo.
- Relajar los músculos abdominales, dejando que caigan hacia la columna vertebral.
- Relajar la columna vertebral, dejando que se alargue y se «derrita» en el suelo (como si se fundiera).
- Relajar las caderas y las piernas. Usar solo la cantidad de energía necesaria para mantener las rodillas y las piernas alineadas.
- Visualizar mentalmente la «huella» que se deja en el suelo y cómo la columna vertebral se alarga y se hunde en el mat. Mientras tanto, respirar profundamente, sintiendo como si los espacios que se abren entre las vértebras se llenaran de aire al inhalar.
Errores comunes a la hora de hacer el imprinting
Algunos de los errores más comunes a la hora de hacer el imprinting son los siguientes:
– La espalda no queda completamente plana
El objetivo del imprinting es que la espalda quede plana sobre el mat, sin que queden espacios. Dependiendo de la curva natural de la columna de cada uno, eso puede ser más fácil o más difícil de lograr. Si no se consigue, es importante practicar hasta conseguirlo sin forzar ni obligar al cuerpo.
– Se presiona la columna vertebral firmemente contra el mat
El imprinting es en ejercicio basado en la relajación y en dejar que la gravedad actúe. No hay que forzar el ejercicio, sino dejarla caer. No hay que presionar contra el mat.
Modificaciones para hacer el imprinting
En caso de que exista dolor de espalda o de cuello, o una excesiva curva lumbar (hiperlordosis) se puede colocar una toalla o una manta fina debajo de la zona lumbar, doblada lo suficiente como para empezar a notar el ejercicio.
Poco a poco se puede si reduciendo el grosor de la manta o toalla, a medida que se mejora en este ejercicio. En el caso de usar un manta o toalla, debe estar doblada de manera que queda solo debajo de la zona lumbar.