Es una pregunta muy habitual en las personas interesadas en mejorar sus tiempos de carrera: ¿Cómo corro más rápido? Puede ser más fácil concentrarse en desarrollar resistencia, ya que solo puede agregar unos minutos a las carreras de larga distancia y ver cómo se acumulan los kilómetros. Pero para aumentar la velocidad y correr más rápido, debe adoptar un enfoque diferente, uno que requiere pasar algún tiempo empujando los límites de la comodidad.
Eso sí, el primer paso, como lo es con cualquier nuevo programa de entrenamiento, es considerar la salud y nivel de condición física.
Consejos de entrenamiento para correr más rápido
Si quieres entrenar para correr más rápido y mejorar tus tiempos, hay algunas cosas que puedes hacer para mejorar tu velocidad de carrera y reducir el riesgo de lesiones.
- Asegúrate de calentar adecuadamente antes de cada carrera. Un buen calentamiento te ayudará a aflojar los músculos y a aumentar tu ritmo cardíaco.
- Céntrate en correr con una buena postura. Esto significa mantener la cabeza alta, los hombros relajados y dar pasos cortos y rápidos.
- Incluye algunos sprints en tu entrenamiento. Los sprints ayudan a aumentar la velocidad y la resistencia.
- Asegúrate de enfriar después de cada carrera y de estirar los músculos para evitar lesiones.
Además, es importante que tengas en cuenta los siguientes:
- Sal a correr al menos tres días a la semana. Esto te ayudará a aumentar tu resistencia y a mejorar tu forma.
- Céntrate en tu zancada. Una zancada más larga te ayudará a correr más rápido, pero ten cuidado de no dar una zancada excesiva, que puede provocar lesiones.
- Escucha a tu cuerpo. Si sientes dolor o fatiga, baja el ritmo o detente del todo para evitar lesiones.
Trabaja tu técnica de carrera
Una forma de mejorar tu técnica de carrera es centrarte en tu zancada. Una zancada más larga te ayudará a cubrir más terreno con cada paso y te convertirá en un corredor más rápido. Una zancada adecuada debe aterrizar en un ángulo de 90 grados con la parte superior del cuerpo relativamente inmóvil. Algunos corredores dan una zancada demasiado larga, lo que puede provocar un riesgo de lesión. Otros dan una zancada demasiado corta, lo que no permite un rango completo de movimiento y además supone un gasto de energía. Una buena regla general es dar 180 pasos por minuto.
Desarrolla la velocidad con ejercicios pliométricos
La importancia del calzado
¿Qué hay que buscar en una zapatilla para correr?
A continuación, ten en cuenta tu tipo de pie. Si tienes pies planos o arcos altos, necesitarás diferentes tipos de zapatillas para que tus pies se sostengan correctamente. Si no estás seguro de qué tipo de pie tienes, consulta a un podólogo o acude a una tienda de running que pueda ayudarte a encontrar el calzado adecuado según tu tipo de pie.
Otra cuestión clave es pensar en el dinero que quieres gastar en tus zapatillas. El precio de las zapatillas para correr puede oscilar entre 50 y 200 euros, o incluso más. Es importante encontrar unas zapatillas que se ajusten a tu presupuesto, pero que también satisfagan tus necesidades como corredor.
Por último, cuando compres tus zapatillas para correr, asegúrate de probártelas y caminar o correr con ellas. Es importante comparar la comodidad de varias zapatillas para correr antes de comprar una pareja. Si no te sientes a gusto con las zapatillas para correr o si tienes dolor después de usarlas, no las compres.
¿Qué aspectos hay que priorizar al comprar zapatillas para correr?
No existe una respuesta única a esta pregunta, ya que las mejores zapatillas de running para cada persona varían en función de su tipo de pie, su estilo de carrera y el tipo de terreno por el que va a correr. Sin embargo, hay algunas pautas generales que pueden ayudarte a elegir el par de zapatillas de running adecuado para tus necesidades.
Si eres un corredor de trail, necesitarás una zapatilla con una suela más agresiva para proporcionar tracción en superficies irregulares y resbaladizas. La amortiguación también es importante para los corredores de trail, ya que ayuda a protegerse del impacto de las rocas y las raíces.
Si eres pronador o supinador, necesitarás una zapatilla que te proporcione apoyo y estabilidad extra para evitar que tus pies rueden excesivamente hacia dentro o hacia fuera. También es posible que necesites una amortiguación adicional para proteger tus pies de la tensión añadida de la pronación o la supinación.
Saber si eres supinador o pronador es uno de los primeros pasos para determinar qué tipo de zapatilla de running necesitas. La forma en que tu pie impacta el suelo está determinada por la cantidad de pronación o supinación que haces. La pronación se refiere a la rotación del pie hacia adentro, mientras que la supinación se refiere a la rotación del pie hacia afuera. Si eres neutro, no tienes pronación ni supinación.
Para la mayoría de los corredores, una zapatilla neutra será suficiente. Sin embargo, si tienes algún problema específico en los pies o alguna preocupación, debes consultar con un podólogo u otro profesional médico antes de comprar unas zapatillas para correr.